La última estación

Recientemente he visto esta película. No quiero leer ninguna crítica para no dejarme influir. Magnífico trabajo de Hellen Mirren: tomad nota jovenes actrices, esto es actuar. La condesa Sofia Andreyevna es un personaje convincente, apasionante y apasionado, una esposa obsesiva y posesiva, enamorada a su manera de un marido al que, por encima de todo, quiere controlar. Sobre todo,  quiere manejar el destino de su obra, una producción literaria gigantesca firmada con el nombre de León Tolstoi, que unos iluminados querían ceder al pueblo ruso ¡Qué error!
Tolstoi huyo un día, ya en el final de su vida, de aquella esposa agobiante pero, finalmente, cansado de huir, en el lecho de muerte, la llamó y este encuentro es, para mi gusto, la mejor escena de toda la película. Lo que se llama un digno final.
Me encuentro raro hablando de ésto, porque no me gusta el cine.

El modelo mediterráneo de Farmacia

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Hoy me he quedado sorprendido al ver varias Farmacias en huelga. En la convocatoria (ver foto) se aboga por la estabilidad del Modelo Mediterráneo de Farmacia.
Sorprendente. Yo había oìdo hablar de la dieta mediterránea, pero nunca me pude imaginar que las farmacias tuvieran un modelo "mediterráneo".
A la vista de como funciona la cosa en España, el modelo en cuestión supongo que será aquel en que:

• el oficio de farmacéutico es el de mayor calidad de vida del mundo, ya que 
• el farmacéutico no esta nunca y, si casualmente te lo encuentras --porque ha ido a hacer caja-- ni sabe las características de los medicamentos ni puede darte, por tanto, ningún consejo;
• las farmacias se traspasan a precios fabulosos porque la oferta está restringida y la demanda, dada la calidad de vida del oficio, es prácticamente ilimitada;
• las farmacias se heredan de padres a hijos, como si fueran fincas rústicas;
• te dispensan sin receta cualquier cosa, incluso antibióticos;
• venden cosas que nada tienen que ver con la farmacia, como gafas y cosméticos;
• con las recetas (rojas) del abuelito, las que son gratis, se nutre toda la familia y el farmacéutico, o los mancebos, pasan de comprobaciones.

Este es, por tanto, el modelo mediterráneo de farmacia: poco esfuerzo, gran beneficio, ningún control y nepotismo.

Cataluña necesita un ejército propio

Después de la contundente manifestación independentista días pasados en Barcelona, he llegado a una conclusión: Cataluña necesita un ejército, "Exèrcit dels Paisos Catalans" ¿Porqué? Es obvio, si Cataluña es una Nación, entra en competencia con otras Naciones y necesita defender su territorio, es decir la tierra sagrada de Catalunya, depósito de nuestra cultura y tumba de nuestros héroes ¿De qué enemigos? Principalmente de los más cercanos, que son Francia, Aragón y la Comunidad Valenciana. No digo España, porque es un ente prácticamente llamado a desaparecer. Y cuando hablo de ejército, digo tierra mar y aire ¿Submarinos? Sí, porque nos pueden atacar por mar, que tenemos bastante costa ¿Portaviones? Naturalmente, tenemos que ser capaces de proyectar una fuerza multidireccional
Si no tenemos un ejército nadie nos respetará.

Saramago

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(Dedicado a mi amigo Salvador Ferrando)
El Observatore Romano, con ocasión de la muerte de Saramago, destaca la "ideología antirreligiosa" de Saramago, a quien define como "un hombre y un intelectual de ninguna capacidad metafísica, (y que vivió) agarrado hasta el final a su pertinaz fe en el materialismo histórico, alias marxismo".  En resumen, escribe, se distinguió por "la banalización de lo sagrado" y "un materialismo libertario" radicalizado con los años.
Creo que el Vaticano le está haciendo un elogio.  Precisamente por no tener ninguna ideología religiosa, Saramago era un intelectual respetable. La carga de prejuicios que conlleva el creer en una serie de cosas que no tienen demostración, el seguir los dictados de un ente abstracto y omisciente, cuya voluntad y doctrina han interpretado de modo diverso los  distintos iluminados, limita --si no anula-- la capacidad de juicio de cualquier sedicente intelectual.
Si entendemos por metafísica la rama de la filosofía que se ocupa de explicar la naturaleza fundamental del ser y del mundo, no cabe duda que Saramago era un hombre de una gran capacidad metafísica. Saramago era un hombre espiritual, aunque no religioso, esto no lo entienden los curas.
No me sorprende que Saramago obtuviera el premio Nobel de literatura. Me sorprendería, sin embargo, que se lo dieran al Papa, a pesar de que considero a las religiones una rama de la literatura de ficción.
Alguien que escribe mejor que este bloguero ha dicho ésto