lunes, 26 de abril de 2010

Ha muerto Manuel Fernández Álvarez


Conocí a Don Manuel en la UIMP de Santander en un curso sobre Isabel la Católica. El viejo profesor  alcanzó el éxito a los ¡ochenta años!. Estudió tanto la España de los Austrias que se había "contagiado" del estilo de escritura del siglo XVI, literalmente. A pesar de ello, sus biografías resultan apasionantes, porque tienen carga dramática. Tenía la costumbre de intercalar en su relato párrafos de los documentos históricos, en el castellano original, lo cual, lejos de resultar pesado, me parece cautivador ¡Es tan rico el castellano!
Conocía el Archivo de Simancas como la palma de la mano y de ahí sacó el material para las biografías de Carlos V, el rey guerrero, Felipe II, el rey burócrata, Juana la Loca, la cautiva de Tordesillas, Isabel la Católica que, en el mismo año, terminó la guerra contra los moros, descubrió América y expulsó a los judíos, el Duque de Alba, el militar más efectivo, Cervantes y, últimamente la Duquesa de Éboli, : "He querido ser monja y ser santa y el Rey y el mundo no me han dejado. Pues bien: volveré al mundo, pero que el mundo se prepare".
He leído todas ellas y alguna más que ahora no recuerdo.
Después he viajado, a Granada a ver la tumba de los Reyes Católicos junto a su hija Juana y su yerno Felipe, a Tordesillas a ver la prisión de Juana (la Reina Doña Juana como muy bien decía la guía), sin encontrarla. Al Museo del Prado a ver los retratos de los reyes, a observar el prognatismo de Carlos V (lo que sobresalía su mandíbula inferior, que hacía difícil entenderle), las armaduras de los reyes (la de Carlos V en Mulberg, fantástica).. Me falta ir a Pastrana a ver el Castillo Ducal y luego prisión de la Éboli. Tengo que ir a Simancas a ver el archivo. Me faltan tantas cosas...
Gracias Don Manuel, por hacerme disfrutar de la Historia y ayudarme a comprenderla.

lunes, 19 de abril de 2010

El efecto Lucifer


El psicólogo Philip Zimbardo metió a 24 estudiantes en una cárcel simulada, situada en el sótano de la Universidad de Stanford (California), los dividió en dos grupos y los nombró, a unos carceleros y, a otros, prisioneros, aleatoriamente. Lo llamó el Experimento de la Prisión de Stanford (SPE). Quería saber la influencia de las "situaciones" en la conducta. El experimento estaba pensado para dos semanas, pero sólo duró 6 días ¿Porqué? La situación se le fue de las manos, los carceleros se volvieron sádicos y se ensañaban con los prisioneros, varios de éstos se vinieron abajo anímicamente y entraron en crisis.
El experimento es el objeto de un libro llamado "El efecto Lucifer", que acabo de leer.
Nadie conoce lo perverso que puede a llegar a ser un ser humano si se le coloca en la situación adecuada. El la guerra civil española me han contado como, roto el orden legal, se producían venganzas sangrientas. El que era tu vecino, un tipo amable y tímido, debidamente adoctrinado y uniformado, podía llegar a tu casa secuestrarte y matarte. Sin motivo alguno, sólo porque eras "de los otros", o porque tenías bienes que codiciaba. Todavía yacen en las cunetas algunos de los muertos en "aquello".
Conclusiones del experimento SPE:
Importancia de la situación. La situación social tiene importantes efectos en nuestra conducta, tanta que podemos comportarnos de forma que ni siquiera imaginamos. Distorsiona nuestra identidad y nuestros valores. Si se combina con  otras fuerzas, actúan todas sinérgicamente y se potencian unas a otras.. Estas son:
  • El poder de las reglas que, con el tiempo, cobran vida propia y son, con fecuencia, instrumento de dominio para quienes las aplican. La última regla es, naturalmente, el castigo por el incumplimiento de las demás.
  • La responsabilidad se desvía de uno mismo al papel que representa ("no me culpes a mí, yo sólo cumplía con mi trabajo"; "sólo obedecíamos órdenes").
  • La utilización de uniformes, promueve el anonimato y reduce la responsabilidad personal.
  • El poder del reconocimiento social, de ser "uno de nos nuestros".
  • La deshumanización, ver al otro como una "basura". Se le priva de la libertad, de la privacidad y, finalmente, de la identidad personal. Se le separa de su pasado, su comunidad y su familia.
Pasando al mundo de lo real, este tipo de conducta se dió en los camps de exterinio nazis y en la prisión iraquí de Abu Graib, con los resultados que conocemos.
Todo esto me da escalofríos ...

lunes, 12 de abril de 2010

Titles

The British have an obsession with names and titles. I have in front of me a concert program of the Orchestra Philharmonia (that’s right, two h), to which I attended yesterday (26-3-10). They have a Patron, a President, six Conductors (Principal, Honorary for Life, Guest, Conductor (plain), Laureate, and Emeritus) an Artistic Director and two Concert Masters. On top of that, there is also a Chairman, a Managing Director, and a Deputy Managing Director… But who wears the britches? Difficult to say. Not certainly the Patron, The Prince of Wales, who occasionally wears kilts, and is widely recognized for his lazy lifestyle.
But the Prince of Wales has his own set of titles, HRH, KG, GBC and OM, the meaning of which would crowd anyone's visiting card.
With the help of the Acronym Finder, I have investigated:
HRH, His Royal Highness
KG, Knight of the Garter
GCB, Grand Cross of the Bath
OM, Order of Merit
Excuse me, Charles, you need all that? 
And, of all the six conductors, who wields the baton? Well, in yesterday’s concert, none of the above, but Mr. Riccardo Muti …a commoner.

lunes, 5 de abril de 2010

Dinero de los contribuyentes

En el documental del ácido Michael Moore "Capitalismo: una historia de amor" se menciona con mucha frecuencia la frase "dinero de los contribuyentes" (taxpayer's money). Si los bancos fueron los causantes de la actual crisis financiera, dice Moore, ¿porqué los contribuyentes deben acudir en su ayuda, porqué no dejar que quiebren y paguen sus propios accionistas?
La noción de que el gasto público es dinero del contribuyente es, diría yo, desconocida en España. El gasto público es, dinero del Estado y el Estado no es sino un ente abstracto que tiene muchos fondos y que nadie sabe de donde proceden. Mi presidente autonómico, que es una máquina de pedir, no dice al Estado: pídale más fondos al contribuyente y démelos a mí, o quítele los fondos a otra partida presupuestaria y reasígnemelos, dice simplemente: deme más dinero.
Nosotros debíamos preguntar: ¿donde está nuestro dinero?

Duplicaciones discriminatorias

  La Constitución venezolana   duplica cientos de términos: “Toda persona detenida tiene derecho a comunicarse de inmediato con sus familiar...